7 nov 2010

¡Trabaja y calla!

¡Trabaja y calla!

Así podría resumirse la vida de muchas personas alrededor del mundo. Unos trabajan para (sobre)vivir y otros viven para trabajar, pero pocos trabajan para si mismos y no son menos a los que su trabajo no les permite vivir.
Hoy, con un desarrollo tecnológico inimaginable hace solo 50 años, nos hemos vuelto más productivos (hacemos más en menos tiempo) y parece que la única repercusión que ha tenido esto es el afan consumista que se apodera de la sociedad. Algo normal, ¿no?, producimos más pues habrá que consumir más...sí, claro.
La causa directa de ser mas productivos debería ser la reducción de la jornada laboral, nada más y nada menos, si necesitamos menos tiempo para la producción entonces no necesitamos malgastar nuestro tiempo en sobreproducir. Y el efecto directo la reducción de la jornada laboral sería la contratación de parados que suplan el horario reducido de la jornada de los demas trabajadores. La repartición del trabajo.
Qué locura, trabajar menos, cobrar más, vivir mejor, tener más tiempo para uno mismo, trabajar todos. Pues sí.
Y todo esto sin mencionar las condiciones laborales de hoy en dia, sin tener en cuenta la diferencia de salarios entre los que trabajan y los que se aprovechan o la posible autogestion y autoorganización de los trabajadores en cooperativas organizadas de manera horizontal...
La sociedad la debemos cambiar y para ello necesitamos la colaboración de todos, debemos luchar por las causas justas, tomar constancia de las desigualdades del dia a dia y actuar, no deleguemos responsabilidades, esta es nuestra responsabilidad.
¡No cambiaré el mundo, pero claro que mi entorno!

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